martes, 20 de julio de 2021

"Donde se halle la ofensa, deja que caiga el hacha"

 

Como es bien sabido los pueblos nórdicos son conocidos por el uso de las hachas para las labores civiles, pero sobre todo para las belicosas.  








 

Las hachas pequeñas bien podían tener usos intercambiables, pero hay una muy llamativa que si bien sus orígenes son la tala de árboles, con el tiempo evolucionó hasta tener unas propiedades que la convirtieron en el terror en el campo de batalla… si es que un puñado de gentes enormes desembarcando en los alrededores de tu poblado con el único deseo de saquear y conseguir esclavos no da suficiente miedo ya…


Estoy hablando del hacha danesa, básicamente un hacha de entre 120 y 180 cm de largo con una cabeza grande, ligera y afilada. Un trasto que se ganó su sitio entre las filas de los vikingos y de las tropas de los hombres del norte durante mucho tiempo.

Este tipo de hachas fueron representadas en el famoso tapiz de Bayeux y tanto fue su uso y abuso que a la guardia Varega, aquellos simpáticos guerreros nórdicos del Rus que formaron una compañía de elite a las órdenes del rey de Bizancio, se los conocía entre otros nombres como “pelekuphoroi” o portadores de las hachas.


Con respecto al proceso de creación del hacha danesa blandita, decir que la técnica de la cabeza sería muy parecida a la del otro hacha vikinga que hice por encargo, y el palo pues como con el tetsubo.

Lo primeroque hubo que hacer fue preparar la forma que tendría la cabeza del hacha. Para esta escogí el tipo L de las tipologías de Petersen sobre las distintas cabezas de hachas de la época vikinga. 


 

 

 

 

 

 

 

 

 


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Todo el meollo iba a estar en que la cabeza fuese segura y resistente. Para lo primero pondría un protector doble de cuero al final de la varilla que daba estabilidad a la hoja, con las costuras en hilo grueso para asegurarme que en ningún caso la varilla proyectase a través de la espuma.

 

 

 

 

 

 

Para lo segundo formé un ángulo recto entre la varilla de 12mm que formaría el mango, y la de 5 de la hoja, colocando una unión de contrachapado para fijarlas. La de 12 atravesaría el taco de madera, y la de 5 atravesaría el taco y la varilla de 12. El resultado es muy estable y parece resistente, veremos a ver cuanto…

 

Una vez formado el esqueleto, lo demás es lo de siempre, forrar de espuma, pintar y cubrir. 

 

 

 

 

 

 

 
















 

 

 

 

 Y un último detalle..

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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