viernes, 7 de junio de 2019

Nuevo set de espadachín de softcombat

Nuestro set de espadachín ha tenido un seguidor y hemos sido comisionados a crear un segundo par. Las especificaciones serían las mismas con la salvedad de la guarda del estoque, que tendría que ser tipo "conchas".

Como el proceso ya es conocido, me limitaré a poner las fotos del proceso.

 
 
 
 


 

 

 

 

  

  

 


Y como extra, unas fotillos interesantes del equilibrado. Una con contrapeso y la otra con la varilla metálica de 12mm basicamente hasta hacer tope con la varilla de fibra.

 

 



 

"Tu conocimiento no puede salvarte, tu magia no puede salvarte, nada puede salvarte"

Memorable cita de un joven Hida Kisada, antes de que tantas cosas raras le sucediesen.

Es pensar en Kisada y se me viene a la mente un enorme e imponente tetsubo, y si me pongo a pensar en un tetsubo, solo veo dolor...  hostia, hagamos un tetsubo!!








 


El tetsubo o kanabo es palo de metal o madera, remachado en su mitad superior usado por los señores guerreros del japon feudal. Era mucho menos usado que sus hermanos de filo y, de hecho, tiene el triste honor de ser de las pocas (si no la única) arma contundente del arsenal nipón.

Por lo que he podido investigar habia dos tamaños básicos, el grande que es el que se ve en estas fotos (y que luego vamos a reproducir), y la versión más reducida. Teniendo en cuenta su peso, me inclino a pensar que la versión pequeña era más utilizada.

A pesar de que hay fotos de samurais con kanabos, están más asociados al mito de los ogros y demás bichos malignos y con tendencias gigantistas.




Para nuestras reproducción partiremos de una varilla de fibra de vidrio de 12mm, a la que le iremos enrollando capas de espuma. El tamaño final pretenderá ser 1,50m, con un acabado redondo en la zona de agarre y la zona de golpeo con base hexagonal de "madera" protegida por laminas de metal tachonado.



En esta primera base, utilizo dos espumas. La amarilla es un poco más rigida que la beige, que la coloco en la mitad de golpeo. Tienen shore 30 y 25 respectivamente.

Con la base lijada, le añado el pomo y una capa más en la zona de golpeo que cortaré con forma hexagonal.



























Y lijaré bien...



Con tiras de 2mm montamos los refuerzos metálicos.









Lo grueso ya esta hecho, ahora nos quedan los detalles.






Muy coñazo!, hacer estos remachitos ha sido un puto coñazo, pero en fin... ya esta hechos y en 4 imagenes se resumen muuchas horas de tedio.




Colocamos los remaches y le hacemos pupita al metal. La idea que tenía en la cabeza para este arma era algo muy envejecido y oxidado, mucho más que las que había hecho hasta la fecha.

Punta, pomo y listo.






Ah! se me olvidaba el toque maderil en el mango!




Habemus tetsubo!




Fase 2, pintura.

Multiadherente blanco como de costumbre y una capa base para todo.





A partir de aqui toca ensucirse las manos con el barro...
 







... y el óxido...







Cubrimos y a repartir batazos!




El brillo se va quitando con el tiempo, si me acuerdo, en unos meses pongo fotos (a mi me gusta mucho mas el acabado satinado / mate)

Después de algunos usos, y cuando ya nos fuimos confiando y le pusimos empeño en eso de zurrarnos, el pomo petó. Como se puede ver lo añadí como un extra a continuación de la varilla, para garantizar la seguridad, pero esto hacía que todo el esfuerzo de palanca se lo llevase el pegamento. 
Tocó abrir, empalmar unos centimetros de varilla y cerrar, de manera que tuviese una base rigida dejando libre unos 5 cm de espuma por si acaso.


Con las mismas, en la punta seguí el mismo principio, más vale que sobre a no que falte. Por ahora esta aguantando, pero se dobla mucho en los golpes (esa era precisamente la idea, para paliar fuerza de impacto, sumar la densidad de la espuma al retroceso de la punta).
El futuro nos dirá si fue buena idea o por el contrario va a tocar cortar sus buenos 5-10cm de punta.